La complejidad que tiene el sistema tributario argentino en cuanto a la cantidad de tributos que deben pagarse a nivel nacional, provincial y municipal –un reciente informe precisó que en el país existen 163 gravámenes– es directamente proporcional a la cantidad de horas que un ciudadano pierde por año en cumplir con sus obligaciones impositivas.
El apartado tributario contemplado en el informe anual del Banco Mundial "Haciendo negocios" precisa que los argentinos pierden 311 horas por año en las tareas de "compliance", es decir, del cumplimiento del pago de impuestos. Son casi 13 días enteros que los habitantes locales –o sus contadores, en el mejor de los casos– deben dedicarle exclusivamente al pago de los impuestos. El país que peor posicionado está, no sólo en América Latina sino en el mundo, es Brasil, donde los ciudadanos pierden casi 2.000 horas anuales en todos los trámites, preparación de formularios y el pago de los tributos.
"La Argentina y Brasil parecen ser los más complejos en la región desde el punto de vista de la administración tributaria, ya que tenés muchos impuestos y diferentes alícuotas a nivel estadual. En Chile, por ejemplo, los principales impuestos se recaudan a nivel nacional. Y Uruguay es muy sencillo porque tiene un sistema centralizado, lo que simplifica mucho la administración tributaria", afirmó a Infobae el director de Impuestos y Legales de PwC Argentina, Juan Manuel Magadán.
La complejidad del sistema tributario argentino no sólo radica en que hay muchos impuestos, sino también en la cantidad de formularios y declaraciones que hay que llenar para pagarlos
De acuerdo con el ranking, que realiza el BM junto con PWC todos los años, Chile y Uruguay se encuentran por debajo de la Argentina en cuanto a la cantidad de horas que insume el cumplimiento de las obligaciones tributarias, con 296 y 163 horas por año; al igual que Colombia, Perú o México, donde los trámites y el pago de impuestos lleva 255, 260 y 240 horas, respectivamente. Pero Venezuela, Ecuador, Bolivia y Brasil están bastante por encima. En esos países, los ciudadanos, o contadores, pierden 792, 664, 1025 y 1958 horas por año en esa tarea. En Paraguay, también el tiempo de compliance es superior al de la Argentina, con 378 horas anuales dedicadas al pago de impuestos.
El número de Argentina es algo menor al promedio de América Latina y el Caribe, que asciende a las 330 horas anuales, pero está muy por encima del promedio de los países de altos ingresos de la OCDE, donde sus habitantes pierden 159,4 horas, o 6 días, en la tarea impositiva. En Finlandia, por ejemplo, insumen 90 horas anuales; en Noruega, 79; y en Dinamarca, 132.
Sobre la Argentina, el tributarista César Litvin remarcó que "el sistema se podría simplificar mucho, ya que de los 163 tributos que existen, 10 son los que más recaudan". "Además, nuestra estructura impositiva es compleja porque hay muchos impuestos que son distorsivos, y que representan el 10,5% del PBI. Los principales son ingresos brutos, derechos de exportación y el impuesto al cheque", afirmó el analista, quien agregó: "Chile sólo tiene un 0,6% de tributos distorsivos".
Litvin no se mostró sorprendido por la cantidad de horas que insume el pago de impuestos en Brasil porque ese país tiene "uno de los sistemas tributarios más complejos" a nivel mundial. En el mayor socio del Mercosur no sólo existe el federalismo fiscal, sino que en el caso del IVA, por ejemplo, tiene diferentes alícuotas según la región. "Otro país muy complejo con los tributos es España porque también hay federalismo. De hecho, la gran pelea entre los catalanes y los españoles es por la autonomía tributaria", repasó Litvin. Aún así, en este caso sus habitantes pierden menos de 150 horas anuales en el pago de sus obligaciones.
El sistema se podría simplificar mucho, ya que de los 163 tributos que existen, 10 son los que más recaudan (Litvin)
La complejidad del sistema tributario argentino no sólo radica en que hay muchos impuestos, sino también en la cantidad de formularios y declaraciones que hay que llenar para pagarlos, además de lidiar con sistemas informáticos que muchas veces dejan de funcionar justo antes de un vencimiento. "Normalmente, los aplicativos que pone a disposición la AFIP para preparar los datos tienen dos problemas: se ponen a disposición muy cerca del vencimiento, lo que genera grandes cuellos de botella, y por otro lado, la experiencia de los últimos años es que contienen errores que hacen el trabajo del contador un verdadero infierno", señaló el tributarista.
También hizo mención al "esfuerzo inusitado" que llevará la presentación de las declaraciones juradas para pagar Ganancias por la renta financiera para los portafolios en el exterior.
Ranking general
El ranking tributario general elaborado por el Banco Mundial y PwC contempla varios ítems, entre los cuales figuran las horas que insume el pago de impuestos, pero también la carga tributaria. Se toma el caso base de una empresa y se aplica la estructura impositiva de cada país. Así, la Argentina figura en el puesto número 169º, mejor que Brasil (184º) y Venezuela (189º), pero peor que Chile (76°), Uruguay (101°), México (116°), Perú (120°), Paraguay (127°), Ecuador (143°) y Colombia (146°).
La carga de impuestos y contribuciones en Argentina equivale a 106% de las utilidades empresariales antes de impuestos, cuando el promedio de dicha carga para América Latina es de 46,7% y 39,8% para los países de altos ingresos de la OCDE.
La alta presión tributaria existente en la Argentina ha sido uno de los principales reclamos de todo el arco empresario desde que asumió la gestión de Mauricio Macri, a fines de 2015. Durante los primeros dos años, la carga tributaria bajó en aproximadamente dos puntos del PBI; en 2018 subió levemente y este año volverá a trepar por la reinstalación de los derechos de exportación y la suba de Bienes Personales, estimó Litvin.
Hoy la presión tributaria se estima en 33% del PBI, muy cerca del promedio de los países de la OCDE (34%), pero muy por encima del promedio de América Latina, que tiene una carga de impuestos del 26% del PBI.
Fuente: Infobae